Gobernanza democrática
La buena gobernanza promueve, respalda y preserva la equidad, la participación, el pluralismo y el desarrollo.
Mejorar la gobernanza democrática de un país es un mecanismo quizás menos tangible y más complejo que las políticas sociales, pero igual de importante y efectivo para la construcción de cohesión social. Para ello se requiere de instituciones políticas y estatales eficientes y eficaces, con legitimidad entre sus ciudadanos, que conduzcan sus acciones bajo principios de transparencia y probidad. La corrupción, la violencia, la impunidad o la falta de acceso a la justicia merman las capacidades del Estado. Fortalecer, por tanto, el Estado democrático y de derecho es fundamental para la formulación de políticas incluyentes y el desempeño eficiente de sus funciones administrativas y de gestión.