El Programa nacional de uso racional de medicamentos en Colombia: un caso de éxito de la “nueva cooperación”
Para apoyar el diseño e implementación de su Programa nacional de uso racional de medicamentos, el Ministerio de Salud y Protección Social ha liderado una exitosa estrategia de cooperación entre donantes internacionales y actores nacionales y locales
La estrategia es una apuesta acertada, presentada en un taller en el Ministerio de Salud, que se convierte en un ejemplo paradigmático de la agenda de eficacia de la ayuda y que está dando sus primeros frutos.
Con la aprobación de la política farmacéutica (CONPES 155/2012), el Ministerio de Salud sienta las bases de una ambiciosa reforma para mejorar el acceso a medicamentos de la población colombiana. Uno de los objetivos de esta política es mejorar el uso racional de medicamentos, para evitar el uso inadecuado (y sus consecuencias negativas sobre la salud), así como también racionalizar el gasto público y privado en salud. En ambos casos, las personas más afectadas son además las más vulnerables; bien por falta de información, por dificultades de acceso, y/o por gastos desorbitados (que pueden conducir a caer en situación de pobreza). Debido a estos factores, entre otros, el uso irracional de medicamentos agudiza las desigualdades.
Apostar por el uso racional de medicamentos es, por tanto, una apuesta por la equidad. Con estas premisas, el programa de cooperación de la Unión Europea EUROsociAL inició en 2013 un acompañamiento a la política de uso racional, sumando esfuerzos e integrándose en una ambiciosa estrategia de cooperación colaborativa pilotada por el Ministerio de Salud, que se presentó en Bogotá los días 26, 27 y 28 de enero.
El taller, inaugurado por la Vice-Ministra de Protección Social, Carmen Eugenia Dávila, tenía como objetivo reflexionar sobre los avances y las perspectivas de la estrategia colaborativa, y presentar los primeros resultados del proyecto piloto.
La primera sesión permitió destacar las principales características de la estrategia colaborativa, que articula, de manera horizontal, los actores nacionales y locales involucrados en la política de medicamentos (Secretaria de Transparencia, Universidades, Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, Instituto de Evaluación de Tecnologías en Salud, Secretarías de Salud departamentales, asociaciones profesionales). Por otro lado, articula a actores de la cooperación internacional: EUROsociAL, programa Anticorrupción y Transparencia de la Unión Europea (ACTUE), BID, Agencia Francesa de Desarrollo, OPS. De esta manera, el Ministerio asegura la alineación de los donantes sobre su política, sus objetivos y sus tiempos; y saca partido del valor añadido de cada uno de ellos. La estrategia asegura una efectiva coordinación y complementariedad en la actuación de los donantes, desde el liderazgo del ministerio, evitando algunas de las trampas más frecuentes de la cooperación: solapamientos, superposición a las estructuras administrativas, acciones sin orientación a resultados, etc. Se trata, en palabras de la representante del BID, “de un cambio de paradigma y de un ejemplo extraordinario de colaboración”. Una clara puesta en práctica de los compromisos internacionales en materia de eficacia de la ayuda.
Las sesiones siguientes se centraron en la presentación de los primeros resultados del proyecto piloto, que se puso en marcha en agosto de 2014 en 6 hospitales del departamento de Cundinamarca, y que promueve el uso racional de medicamentos para tratar la hipertensión. El piloto incide en la producción de información independiente, para fomentar la prescripción de medicamentos que, a igualdad de indicación y eficacia, tienen un menor coste y además están incluidos en el Plan Obligatorio de Salud (paquete de servicios básicos cubiertos por el sistema de seguridad social); con un ahorro substancial no solamente para el sistema público de salud, sino también para los pacientes. Se espera alcanzar una prescripción del medicamento más accesible en un 80% de los casos.
Movilizando las experiencias de la Comunidad de Madrid, de Navarra, de Francia, de Suecia y de Argentina, EUROsociAL ha apoyado el piloto con la elaboración de tres productos: un boletín de información independiente (colaboración con el BID), un sistema de información de apoyo a la prescripción (colaboración con la Secretaría de Salud de Cundinamarca) y el formulario terapéutico nacional (colaboración con el programa ACTUE). Con apenas 5 meses de funcionamiento, los primeros resultados son alentadores. En el hospital de Soacha, que atiende en su mayoría a población vulnerable (estratos 1-4), la prescripción del medicamento más caro ha disminuido notablemente.
En la clausura del taller, el Ministro de Salud, Alejandro Gaviria, confirmó que ya está elaborado el borrador de resolución que busca reglamentar el uso racional de medicamentos y la transparencia de las relaciones de la industria farmacéutica con los profesionales de la salud*. El Ministro aseguró que la medida busca “cambiar las conductas y evitar algunos de estos usos irracionales de medicamentos”.
El experto de la Agencia Francesa del Medicamento que participó en el taller explicó que en Francia este tipo de medidas ha permitido regular la información de alrededor de 2.000 empresas del sector de medicamentos, equipamiento médico y cosmética. En Colombia, se trata de un primer paso para “reconquistar los espacios”, uno de los principales retos según el equipo asesor del Ministro.
En los próximos meses, EUROsociAL seguirá apoyando esta reforma, con la actualización del marco regulatorio y el escalamiento del piloto a un programa nacional.
El proyecto de resolución se encuentra disponible en la página web del Ministerio, en un proceso abierto y participativo a recibir observaciones y comentarios hasta el 15 de febrero de 2015.
En la foto: Jean-Baptiste Brunet (Agencia Francesa de Medicamentos), Alejandro Gaviria (Ministro de Salud) y Carolina Gómez (Directora de Medicamentos, Ministerio de Salud de Colombia)
FIIAPP