Este barrio de Rio de Janeiro que dio título a la famosa película de 2002, fue el elegido para ser la sede de la primera ""Casa de Derechos"" de Brasil cuyo objetivo es el de promover el pleno disfrute de los derechos fundamentales, alimentar una cultura ciudadana y crear un clima de confianza en las instituciones del Estado así como garantizar servicios jurídicos esenciales a las comunidades vulnerables que viven en los barrios periféricos de las ciudades brasileñas.

En 2009, Cidade de Deus  fue la segunda favela carioca ""pacificada"" por medio de una operación militar que llevó a la expulsión del narcotráfico y la creación de una unidad de policía especial en el barrio (Unidad de Polícia Pacificadora ? UPP). Desde entonces, los índices de criminalidad han bajado sensiblemente pero la presencia de las instituciones del Estado sigue siendo débil y las relaciones con la policía permanecen tensas.

""La apertura de una Casa de Derechos en Cidade de Deus es una clara señal del interés que el Estado tiene en acercarse a esta y otras comunidades marginalizadas,"" declaró Elena Incisa di Camerana,  gerente de programas para IDLO en América Latina.  Además, añadió: ""En la medida en que fortalece la capacidad de las instituciones para responder a las necesidades de las comunidades vulnerables y empodera a la gente para que conozca sus derechos y los mecanismos para reclamarlos,  el proyecto Casa de Derechos promoverá un acceso más equitativo  al derecho y  la justicia.""